martes, 18 de febrero de 2014

Tu factura de la luz no puede ser más clara (El laberinto eléctrico)

Tal cual. Sin problemas, sin remordimientos, con toda la desfachatez del mundo, con doble intención o triple, para que nadie pueda protestar ni acusar ni demandar, porque ya han decidido que somos tontos y ellos listos —muy listos— y omnipotentes. No se conforman sólo con tener el poder; tiene que ser, además de absoluto, incontestable.
Laberinto luz Víctor Jiménez 2013 acrílico lienzo
Laberinto de la luz (2013) Víctor Jiménez
¿La factura de la luz no puede ser más clara porque no quieren o porque no pueden? Porque si se esforzaran más —con lo poderosos que son— seguro que podrían, aclararla digo. ¿O sí que pueden pero no les da la gana aclararla? En este caso parecen refugiarse en la premisa “poder es querer”; ergo no puedo porque no quiero.
Si la frase hubiera continuado “...porque tenemos algo que ocultar”, entiendo que los usuarios, en bloque, saldrían a la calle a protestar y los juzgados se colapsarían con denuncias fundadas.
Por el contrario, si hubieran seguido con “...porque somos incapaces de hacerlo”, el resultado hubiera sido el mismo porque los usuarios hace mucho tiempo que exigimos claridad —y los juzgados seguirían colapsándose—.
También podrían haber finalizado de esta manera: “...porque no”. Serían más honestos, desde luego; pero entonces los usuarios podríamos negarnos a pagarla porque sí —con idénticos resultados para  los juzgados—.

A mí se me ocurre que podrían terminarla con una mezcla de las tres. “Tu factura de la luz no puede ser más clara porque no queremos hacerlo, tenemos tanto que ocultar, que de hacerlo, saldríais a la calle a protestar y colapsaríais los juzgados”, y con la actual política de recortes tampoco está claro que los juzgados contrataran más personal para agilizar el trabajo.